
Un estudio sugiere que la arcilla allanó el camino para que la evolución diera lugar a especies animales más complejas.Durante 3800 millones de años la vida sobre este planeta fue muy aburrida y monótona, pues durante gran parte de ese tiempo prácticamente consistió en organismos unicelulares. Después de ese tiempo incluso los seres pluricelulares eran poco más o menos que esponjas sin ninguna complejidad. Hace solamente unos 550 millones de años una increíble explosión de vida animal sucedió sobre la Tierra. Multitud de planes corporales fueron inventados simultáneamente y nuevos seres mucho más modernos poblaron la Tierra. En esa época aparecieron los trilobites y muchos otros seres ya extintos, entre otros Pikaia, el primer cordado del que se tiene noticia y cuyo linaje generó con el tiempo todos los vertebrados incluyendo al ser humano. Lo expertos no están seguros de la razón para semejante explosión de vida, pero en los estratos geológicos hay claramente un antes y un después. Muchos científicos creen que el aumento del oxígeno atmosférico fue el causante de este fenómeno. Sabían que la fotosíntesis había estado produciendo oxígeno durante miles de millones de años, pero esto no se traducía en una acumulación significativa de este gas en la atmósfera hasta justo en el periodo Cámbrico. La razón para este súbito aumento ha sido un misterio hasta ahora.Ahora un equipo de investigadores dirigido por Martin Kennedy y sus colaboradores de la Universidad de California en Riverside sugieren que la razón de esta liberación de oxigeno podría residir en la arcilla. Sus resultados han sido publicados en la revista Science.Este equipo ha analizado capas de arcilla en el registro geológico correspondientes a los sedimentos marinos de diversas épocas concluyendo que la arcilla atrapó los compuestos orgánicos generados en la Tierra, y susceptible de “robar” el oxígeno, retirándolos por tanto del sistema. Los compuestos orgánicos reaccionan muy fácilmente con el oxígeno, eliminando a este último del ciclo. Las arcillas al atrapar fuertemente estos compuestos permitieron que el oxígeno producido por las plantas se liberara a la atmósfera. Hoy en día las rocas arcillosas se forman en el suelo cuando organismos microscópicos interactúan con los minerales. La arcilla resultante es lavada por la lluvia y finalmente es depositada en las cuencas oceánicas donde sus propiedades químicas le permiten atrapar compuestos de carbono.

Fuente: UC Riverside
3 comentarios:
Que bueno !! Se echaba de menos estas golosinas. Gracias
Publicar un comentario